Vida Natural


Este blog ha sido creado para poder compartir con todos ustedes mis conocimientos sobre como debemos llevar una vida sana, a nivel físico, mental y espiritual.

hoy en día el hombre se ha alejado de su naturaleza. Con este pequeño espacio quiero recordar a la humanidad lo que somos, cual es nuestro objetivo y como encontrarlo.

mi única meta es recordarles que debemos detenernos para reflexionar y así poder continuar por el camino que ya teniamos trazado nada más nacer.

Mi vida ha sido un largo caminar, buscando, preguntando, informándome a través de libros, cursos, … buscando respuestas a mis inquietudes. Y hoy he decidido que quiero compartir mis conocimientos contigo. Si pones en práctica lo que te cuento en mi blog y lo haces poniendo tu corazón, pronto verás los resultados.

¡Son increíbles! Pero eso depende de ti y de lo que quieras lograr.

Me considero una persona feliz y doy gracias a Dios por ello, hago todo lo posible por estar rodeada de buenas vibraciones y las que no lo son las transformo y aprendo de ellas.

Espero que encuentres la respuesta de lo que buscas en mi blog y si no lo encuentras, puedes escribirme y juntos encontraremos la respuesta.



Los Elementales

Elementos de la NaturalezA (Primera Parte)
        
      Para poder hablar de los elementos, primero quiero hablarles sobre el origen del hombre. Es muy significativo observar que entre tantas culturas exista un parecido, cuando se habla de la creación, del origen del hombre o del universo. Esto nos lleva a pensar que a pesar de las apariencias o diferencias culturales hay una verdad fundamental (todos formamos parte de un todo).
  


Elementos de la NaturalezA (Segunda Parte)

    Hagamos un corto pero apasionante recorrido por los principios de los tiempos.  Según la tradición bíblica, nada existía antes de que Dios creara el mundo. Y esta forma de pensar está presente en el judaísmo, islamismo, cristianismo, entre los griegos, egipcios, australianos, mayas y muchos otros, como el hinduismo que a pesar de ser politeísta (cada ser creado tiene un Dios), tienen su Dios creador del universo VISNÚ. 

    El budismo no habla del origen del universo, ya que para ellos  este tema no tiene mayor importancia. Así que no desmienten o apoyan ninguna teoría ya que este interrogante carece de importancia. La verdadera importancia es enseñar a la gente a vivir en el presente, el aquí y el ahora.

     El taoísmo o filosofía china, trata el cuerpo humano como si de un microcosmos se tratara: la energía que fluye en el universo influye en el cuerpo humano. El objetivo de esta filosofía es integrar al hombre en la naturaleza, enseñarle a fluir, a integrarse en sí mismo en concordancia y armonía, ganando así serenidad mental y energía física.   

LA UNIÓN DEL HOMBRE CON LA NATURALEZA 



     Un tema a destacar entre los mitos sobre el origen del universo, es la relación que hay entre el ser humano y la naturaleza. 

   El hombre se relaciona con todos los elementos que componen el universo y todos los principios existentes. Para nadie es un secreto que el cuerpo humano contiene en su materia compuestos  de minerales y elementos del planeta y del universo, no se trata solo del hecho de que tenemos contacto directo con la tierra con nuestros pies, respiramos el oxigeno del aire, nutrimos nuestro cuerpo con el agua o que nos calentamos atreves del fuego: la llama que nos ilumina y que nos aporta energía con la luz del sol.

      Si nos detenemos y analizamos por un momento, no podemos negar que el cuerpo humano tiene tal semejanza y puede ser considerado como un microcosmos y que este sea reflejo del macrocosmos.

   Nuestros ancestros no ignoraban este hecho y se ha mantenido una relación con la naturaleza durante todos los tiempos, ya que tenían presente que la naturaleza es fundamental para subsistir en todos los ámbitos del ser. 

      Nuestros ancestros ya sean los Chinos , los Egipcios , los Budistas ,los Mayas, etc..., han formulado teorías, sobre cómo nos afectan y qué relación tiene cada elemento  en sus diversas formas: agua, fuego, aire, tierra; agregando un quinto elemento, al que se le llama energía o espíritu, según qué cultura.